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Hermandad Prerrafaelista
La Hermandad Prerrafaelista o Prerrafaelita (Pre-Raphaelite Brotherhood) fue una asociación de pintores, poetas y críticos ingleses, fundada en 1848 en Londres por John Everett Millais, Dante Gabriel Rossetti y William Holman Hunt. La Hermandad duró como grupo constituido apenas un lustro, pero su influencia se dejó sentir en la pintura inglesa hasta entrado el siglo XX.
Los prerrafaelistas rechazaban el arte académico predominante en la Inglaterra del siglo XIX, centrando sus críticas en Sir Joshua Reynolds, fundador de la Royal Academy of Arts. Desde su punto de vista, la pintura académica imperante no hacía sino perpetuar el manierismo de la pintura italiana posterior a Rafael y Miguel Ángel, con composiciones elegantes pero vacuas y carentes de sinceridad. Por esa razón, ellos propugnaban el regreso al detallismo minucioso y al luminoso colorido de los primitivos italianos y flamencos, anteriores a Rafael (de ahí el nombre del grupo), a los que consideraban más auténticos.
Perséfone, de Dante Gabriel Rossetti.
En español, los integrantes de la hermandad son conocidos indistintamente como «prerrafaelitas» o «prerrafaelistas». El movimiento suele recibir el nombre de «prerrafaelismo».
Contenido
Comienzos de la Hermandad
La sesión inaugural de la Hermandad tuvo lugar en casa de los padres de John Millais, en Gower Street (Londres), en 1848, y en ella estuvieron presentes John Everett Millais (1829–1886), Dante Gabriel Rossetti (1820–1882) y William Holman Hunt (1827-1910), considerados los fundadores del grupo. Hunt y Millais eran estudiantes en la Royal Academy of Arts. Rossetti era discípulo de Ford Madox Brown (1821–1893), y había conocido a Hunt tras haber quedado impresionado por su cuadro La víspera de Santa Agnes, basado en el poema de Keats. Rossetti, también poeta, estaba interesado en desarrollar los lazos entre la poesía romántica y el arte.
En otoño del mismo año, se añadieron otros cuatro miembros a la Hermandad: William Michael Rossetti, hermano de Dante Gabriel Rossetti, Thomas Woolner, James Collinson y Frederic George Stephens. Ford Madox Brown no llegó a unirse a la Hermandad, pero permaneció siempre muy cercano a ella. Algunos otros pintores y escultores tuvieron también una relación muy estrecha con el grupo, sin llegar a formar parte de él: Charles Alston Collins, Thomas Tupper y Alexander Munro. Todos ellos mantuvieron en secreto la existencia de la Hermandad a los miembros de la Royal Academy.
Fuentes e inspiración del prerrafaelismo
Los autores de esta corriente se inspiraron básicamente en el estilo artístico que se dio antes del maestro Rafael, de ahí el nombre que tomaron estos artistas. Es decir, su pintura se focaliza especialmente en evocar el estilo de los antiguos pintores del Renacimiento, especialmente basándose en los autores y temas propios del Quattrocento, el Trecento y asuntos aún más antiguos, medievales principalmente, leyendas arcaicas e incluso, como en el caso del pintor Lawrence Alma-Tadema, pasajes de la época clásica de Grecia y Roma.
Entre los artistas más recientes, les inspiraron también las pinturas románticas de Heinrich Füssli y, sobre todo, de William Blake, cuyas visionarias pinturas e ilustraciones de sus libros de poesía influyeron notablemente en algunos cuadros de Rossetti, por su simbolismo y lo fantasmagórico de los protagonistas de los cuadros.
Ideario del grupo
Los objetivos de la Hermandad se resumían en cuatro declaraciones:
- Expresar ideas auténticas y sinceras;
- Estudiar con atención la Naturaleza, para aprender a expresar estas ideas;
- Seleccionar en el arte de épocas pasadas lo directo, serio y sincero, descartando todo lo convencional, autocomplaciente y aprendido de memoria;
- Y, lo más importante de todo, buscar la perfección en la creación de pinturas y esculturas.
Estos principios no tenían un carácter dogmático, ya que los prerrafaelistas creían en la libertad personal de los artistas para escoger sus propias ideas y técnicas pictóricas. Bajo la influencia del Romanticismo, pensaban que la libertad y la responsabilidad eran en el arte conceptos inseparables. Sin embargo, les fascinó particularmente la Edad Media, que entrañaba para ellos una integridad espiritual y creativa que se había perdido en épocas posteriores. Este énfasis en lo medieval suponía en la práctica un alejamiento del realismo, que propugnaba una observación independiente de la naturaleza. En sus primeros momentos, los prerrafaelistas creyeron que medievalismo y realismo eran compatibles, pero en años posteriores el movimiento terminó por escindirse en dos direcciones. La corriente realista fue encabezada por Hunt y Millais, mientras que el medievalismo estaba representado por Rossetti y sus seguidores Edward Burne-Jones y William Morris. La ruptura no fue nunca absoluta, dado que ambas facciones creían en la esencia espiritual del arte, oponiendo así su idealismo al materialismo realista asociado con Courbet y el impresionismo.
En su búsqueda de un colorido brillante, semejante al de la pintura del Quattrocento, Hunt y Millais desarrollaron una técnica pictórica consistente en aplicar por encima del dibujo previamente trazado en el lienzo una fina capa de pigmento blanco, que dejaba visible el dibujo; sobre esta capa húmeda se aplicaba la pintura, con pinceles pequeños y meticulosa lentitud. Esto permitía que el color tuviese en sus cuadros el brillo y luminosidad que buscaban. Este énfasis en la luminosidad del color era una reacción contra el uso excesivo del betún en las obras de artistas ingleses como Joshua Reynolds, David Wilkie o Robert Haydon. El uso del betún dejaba en la pintura zonas oscuras, un efecto que los prerrafaelistas rechazaban.
Visión de la naturaleza
En la visión de la naturaleza[1] de los prerrafaelitas influyeron la democratización de la ciencia y la gran expansión del interés por la historia natural a mediados del siglo XIX.
La visión prerrafaelita era óptica e investigadora. Al otorgar a los detalles naturales el mismo valor que al elemento figurativo principal subvertían la idea académica de una composición organizada jerárquicamente, en la que el fondo quedaba subordinado al foco de interés humano. Cada forma de la naturaleza era tratada con gran exactitud, de forma única y autónoma. Este detallismo en la representación pictórica motivó la comparación con el alcanzado por la fotografía y por el microscopio. Algunos críticos indicaron que una concentración de detalles tan excesiva creaba una sensación de hiperrealismo que iba más allá de las nociones aceptadas de realismo en el arte.
Los prerrafaelitas pintaban directamente del natural, intentando captar de cerca el detalle. Su objetivo no era la ingenuidad, sino la autenticidad. Para ello la ciencia constituía una guía fiable. Pintar al aire libre en lugar de recurrir a la memoria era fundamental para liberar la mente de esquemas preestablecidos y de verificarlo todo a partir del motivo representado.
Un factor importante en la preferencia por la pintura al aire libre fue el deseo de captar el color tal como aparecía en la naturaleza. Esto les llevó a intentar distinguir entre colores “absolutos” (aquellos que poseen los objetos vistos por separado, sin influencia de ningún otro color) y “aparentes” (aquellos que se regulan entre ellos al ser vistos en conjunto).
En cuanto a los lugares representados en sus obras pictóricas, preferían zonas de la periferia de las ciudades, de fácil acceso en tren, siguiendo una especie de principio de proximidad.
Los pintores prerrafaelitas rechazaron la estetización del entorno mediante estrategias pictóricas y aunque el parecido de los paisajes prerrafaelitas con los de los pintores flamencos e italianos primitivos es escaso, existen algunos puntos en común: aislamiento de detalles naturales, enfoque homogéneo en toda la imagen (aspecto que ha sido interpretado como un rechazo de las convenciones paisajistas que predominaron después del Renacimiento) y equilibrio entre los elementos figurativos y paisajísticos.
Controversias públicas
La pintura prerrafaelista fue mostrada al público por primera vez en 1849. Los cuadros Isabella (1848–1849), de Millais, y Rienzi (1848–1849), de Hunt, se expusieron en la Royal Academy, y La juventud de la Virgen María de Rossetti en la exposición libre de Hyde Park Corner. Como habían acordado, todos los miembros de la hermandad añadieron, tras su firma, las siglas PRB (Pre-Raphaelite Brotherhood). Entre enero y abril de 1850 el grupo publicó una revista literaria, llamada The Germ. William Michael Rossetti era el editor de la revista, que contenía poemas de los hermanos Rossetti, Woolner y Collinson, junto con ensayos de arte y literatura firmados por simpatizantes de la hermandad, como Coventry Patmore. Como su corta vida indica, la revista no tuvo gran éxito.
Cristo en casa de sus padres, de John Everett Millais (1850)En 1850 la Hermandad Prerrafaelista se convirtió en el centro de una polémica a causa de la exhibición del cuadro de Millais, Cristo en casa de sus padres, considerado blasfemo por varios críticos, entre ellos el famoso novelista Charles Dickens. Se atacó su medievalismo por retrógrado y su detallismo extremo fue tildado de antiestético y ofensivo a la vista. Según Dickens, Millais mostraba a la Sagrada Familia como un grupo de alcohólicos de los barrios bajos, en poses ridículas y absurdamente medievales. Un grupo rival de artistas de la generación anterior, The Clique, hizo a la Hermandad blanco de sus críticas. Sus ideas fueron atacadas públicamente por el presidente de la Academia, Sir Charles Lock Eastlake.
Sin embargo, el grupo encontró un importante valedor en el crítico John Ruskin, quien elogió su dedicación a la observación de la naturaleza y su rechazo de los métodos de composición convencionales. Más adelante, Ruskin continuaría prestando apoyo a los prerrafaelistas, tanto económicamente como a través de sus escritos.
A causa de estas polémicas, James Collinson abandonó la hermandad. Se propuso sustituirlo por Charles Alston Colins o Walter Howell Deverell, pero no se llegó a un acuerdo. Fue entonces cuando el grupo comenzó a deshacerse, aunque su influencia continuaría haciéndose sentir. Los artistas que habían pertenecido al movimiento continuaron con los planteamientos iniciales del, pero dejaron de incorporar a sus obras las iniciales PRB.
Desarrollo posterior e influencia
Entre los artistas británicos que recibieron influencias del movimiento prerrafaelista puede citarse a John Brett, Philip Calderon, Arthur Hughes, Evelyn de Morgan y Frederic Sandys. Ford Madox Brown mantuvo una estrecha relación con el grupo desde sus inicios.
A partir de 1856, Rossetti se convirtió en el principal representante de la tendencia medievalista del movimiento. Su obra influyó en su amigo William Morris, del que fue socio en su empresa (y con cuya mujer tuvo tal vez un idilio). Ford Madox Brown y Edward Burne-Jones fueron también socios de la misma empresa. Gracias a ella, los ideales de la hermandad influyeron en gran número de arquitectos y diseñadores de interior, despertando el interés por el dibujo y la artesanía medievales. Esto condujo al movimiento llamado Arts and Crafts, encabezado por Morris. También Holman Hunt se implicaría en este movimiento de reforma del dibujo mediante la compañía Della Robbia Pottery.
Hunt y Millais evitaron después de 1850 la imitación directa del arte medieval, interesados en profundizar en los aspectos realistas y científicos del movimiento prerrafaelista. Sin embargo, Hunt continuó destacando la significación espiritual del arte y, tratando de conciliar religión y ciencia, documentó cuidadosamente sus pinturas de tema bíblico con viajes a Egipto y Palestina. Por el contrario, Millais abandonó los postulados prerrafaelistas después de 1860, volviendo paradójicamente a una pintura más académica, con influencias de Sir Joshua Reynolds, que fue duramente condenada por William Morris y otros artistas.
La influencia del prerrafaelismo rebasó los límites de la pintura inglesa, llegando Dante Gabriel Rossetti a ser considerado un precursor del simbolismo europeo. Sin embargo, los ideales artísticos del siglo XX, contrarios a la fijación prerrafaelista por retratar los objetos con precisión casi fotográfica, hicieron que el interés por su pintura decayera, y sólo a partir de los años 70 se le ha comenzado a prestar atención.
Según algunos críticos, el prerrafaelismo podría considerarse el primer movimiento de vanguardia. Algunos rasgos del grupo (la intención rupturista, su carácter programático, la adopción de un nuevo nombre para su arte o la publicación de una revista, The Germ, como órgano de promoción del movimiento) sí parecen anticipar lo que luego será común en las vanguardias; sin embargo, su cuestionamiento de la tradición es mucho menos radical que el de las vanguardias, y no afecta a lo esencial: la mímesis, o imitación de la naturaleza, sigue siendo para ellos el fundamento del arte.
Principales artistas
La Hermandad Prerrafaelita
- John Everett Millais (pintor)
- Dante Gabriel Rossetti (pintor, poeta)
- William Holman Hunt (pintor)
- William Michael Rossetti (crítico)
- Thomas Woolner (escultor, poeta)
- James Collinson (pintor)
- Frederic George Stephens (crítico)
Artistas y personalidades relacionados con la Hermandad
- Ford Madox Brown (pintor, diseñador)
- Edward Burne-Jones (pintor, diseñador)
- Arthur Hughes (pintor)
- Jane Morris (modelo)
- William Morris (diseñador, arquitecto)
- Christina Rossetti (poeta)
- Elizabeth Siddal (pintora, poeta y modelo)
- John William Waterhouse (pintor)
- Thomas Cooper Gotch (pintor)
Ford Madox Brown
Ford Madox Brown fue considerado el mayor de la corriente, pues nació en 1821, y nunca llegó a formar parte de la Confraternidad de los Prerrafaelistas (Prerraphaelite Brotherhood), una organización en principio secreta. Sin embargo, compartía con ellos su rechazo a los modelos más clásicos y académicos, y mostraba un claro interés por la pintura de índole medieval. Su vida académica fue intensa y se formó en varias ciudades, entre ellas Brujas, Gante y Amberes, pero la que más le marcó fue Roma, donde estuvo entre 1845 y 1846, frecuentando a los Nazarenos, una corriente artística nacida en 1806 en Viena, y tuvo la oportunidad de estudiar a fondo la pintura italiana, base esencial de todo artista. En 1846, viudo de su primera esposa, Elisabeth Bromley, regresa a Inglaterra, donde años después conocerá a Rossetti, entonces siete años más joven que él, y además le presenta a Millais y a Hunt.
Brown se dedicó a la pintura básicamente pintura histórica y de temas referidos a la Biblia. Su carácter retraído y solitario fue acentuado por ciertas tragedias familiares y numerosos fallecimientos de índole personal. Estos incidentes, sumados a su interés por los problemas de la época (desigualdad social, la industrialización, la emigración) dieron fruto a una obra intensa cuyos temas cambiaban pero el estilo siempre era el mismo.
En 1865 organizó una muestra personal en Piccadilly, donde recibió buenas y malas críticas por igual: algunas personas alababan su gran pericia técnica, su uso de la luz y sus temas, pero otros rechazaron su estilo de composición y su excesiva vena melodramática. Sin embargo, logró varios encargos de particulares, y entre ellos el más importante fue su participación en los frescos del municipio de Manchester, representando la historia de la ciudad, empresa que le llevó prácticamente 10 años de su vida.
Sus obras más importantes son Trabajo, de 1863, Jesús le lava los pies a Pedro, de 1856, Las semillas y los frutos de la poesía inglesa, de 1851, y El Corderito, de 1859.
John Everett Millais
Millais fue un niño prodigio que ya pintaba desde los cuatro años, y se le consideraba poseedor de un talento poco común, provocando que ya a los siete años su familia se trasladase a Londres para poder ofrecer una buena educación artística a su hijo. En 1840, con sólo 11 años, fue admitido en la prestigiosa Royal Academy, ganándose así el apodo de El Chico. Cuatro años después conoció a Hunt y poco después, en 1848, se unió a la Confraternidad de los Prerrafaelistas. Millais se dedicó a dos temas especialmente como participante en esta corriente: por un lado se dedicó con ahínco a los temas medievales, y por otro, a representar con ironía y ternura asuntos familiares o de índole social, especialmente retratos de familia. En 1853, Millais hace un viaje de placer a Escocia en compañía de algunos amigos, como Ruskin. En el viaje, la esposa de Ruskin, Effie Gray, se enamoró perdidamente de Millais; se anuló el matrimonio con Ruskin, y Millais y Gray se casaron en 1855. Esta unión fue motivo de gran alegría para Millais, quien tuvo ocho hijos con Effie. Fue una época feliz para la familia, porque años después, en 1863, fue nombrado miembro de la Royal Academy, un honorable puesto como artista. Conforme pasaban los años, Millais se fue alejando poco a poco de los temas propios de los prerrafaelistas, focalizándose más en temas amables y populares, que le granjearon la simpatía de los coleccionistas y la crítica, llegando a ser muy famoso por sus pinturas, llenas de conmovedor cariño, de sus hijos, especialmente, los retratos de la pequeña Effie, de cinco años, Mary, Everett y George. En 1896 fue elegido presidente de la Royal Academy, pero Millais moriría ese mismo año, apenas ejerciendo su puesto unos meses.
Sus pinturas más conocidas son Isabella, de 1849, Ofelia muerta, de 1852, Un sueño del pasado, de 1857, Mi primer sermón, de 1863, y Dormida, de 1867.
William Holman Hunt
Hunt fue uno de los artistas arquetípicos de los Prerrafaelistas, disciplinado y prolífico. Su estilo fue considerado de los más brillantes de la época, minucioso en los detalles y jugando continuamente con los efectos de la atmósfera, la luz nocturna y la diurna.
En 1839, siendo aún muy joven, comenzó a estudiar pintura al mismo tiempo que trabajaba como empleado. Tras dos tentativas fallidas, logró ingresar en la Royal Academy, donde conoció a Millais. Para mantener sus estudios en la Royal Academy, realizó numerosas copias de obras famosas y retratos, logrando exponer en 1845 sus primeras obras en la Royal Manchester Institution y más tarde en la propia Royal Academy. Frecuentó la Cyclographic Society, donde trabó amistad con Rossetti y Brown, con quien participó en la fundación de la Confraternidad, a la que fue fiel toda su vida. En 1854 se embarcó en un viaje decisivo para su vida, marchándose dos años a Tierra Santa y Egipto, en compañía de su amigo y también pintor Thomas Seddon. El viaje le conmovió tanto que volvió hasta en tres ocasiones más, en 1869, 1875 y 1892.
En 1865 Hunt se casó con Fanny Waugh, quien moriría a las pocas semanas de dar a luz al primogénito de Hunt, Cyril Benone. Esta mala experiencia se unió a que jamás Hunt fue propuesto, a pesar de su fama, como miembro de la Royal Academy, lo que le llevó a desistir de participar en más muestras anuales, y decidió mostrar su obra por libre, en galerías como Grosvenor Gallery y New Gallery. En 1875 tomó por esposa a la hermana de la difunta Fanny, Edith, lo cual le granjeó numerosos problemas con la familia de ésta, que se oponía a la unión, y a las leyes británicas, que por entonces no permitían tal tipo de matrimonios. En 1879 nació su segundo hijo, Hilary. Los años siguientes fueron muy fructíferos para Hunt: en 1886 tuvo lugar una retrospectiva de su obra en la Fine Art Society de Londres, y escribió en algunas revistas, como la Contemporary Review. Además, publicó dos libros autobiográficos, Pre-Raphaelitis y The Pre-Raphaelite Brotherhood.
Sin embargo, sus últimos años de vida se vieron truncados por sus problemas de vista, que le imposibilitaron para terminar muchas de sus más grandes obras, por lo que tuvo que recurrir a colaboradores y ayudantes para acabarlas. en 1905 fue condecorado con la Order Of Merit, y fue autor de numerosas exposiciones en Londres, Manchester, Liverpool y Glasgow.
Sus pinturas más conocidas son El siervo pastor, de 1851, La luz del mundo, del mismo año, Valentino libera a Silvia de Proteo, también de 1851, El despertar de la conciencia, de 1854, El hallazgo de Jesús en el templo, de 1860 y el más importante, La dama de Shalott, basado en un poema de Alfred Tennyson de 1905.
Dante Gabriele Rossetti
Rossetti fue el alma y espíritu total de la Confraternidad de los Prerrafaelistas. Sin ser considerado mejor que otros como Millais o Hunt, su pasión al representar los temas, su turbulenta biografía y sus cuadros, repletos de mensajes alegóricos y misteriosos que influenciaron a los autores de la corriente simbolista, hablan por sí solos y le elevan al máximo expositor de los prerrafaelistas. En 1845, tras ser admitido en la Royal Academy, recibe lecciones del mismísimo Ford Madox Brown; comienza a ser asiduo a las reuniones del Cyclographic Club, donde conoce a Hunt y a Millais, fundando así la Confraternidad. En 1854 conoce al famoso Ruskin, teórico de arte de obligado conocimiento para muchos autores, escritores o pintores, como el propio Rossetti o el escritor Oscar Wilde, de quien se hace amigo íntimo inmediatamente. Por la misma época, ejerce de profesor del futuro artista Burne-Jones y de Morris, con quienes realiza algunos frescos en la Oxford Union, en 1857.
A partir de 1860 comienza la leyenda y el mito de Rossetti, que le perseguiría toda su vida. En ese año, después de un largo y atormentado noviazgo, se casa con Elizabeth Siddal, una hermosa modelo, con pretensiones de artista, a quien Rossetti había conocido años antes mientras ella posaba para la famosa pintura Ofelia, de Millais. Rossetti se obsesionó hasta tal punto con Elizabeth que la representaba en todos sus cuadros, especialmente como Beatriz, la amada de Dante Alighieri, autor con el que Rossetti se identificaba profundamente y al que admiraba sin reservas. La relación fue enseguida un vaivén de altibajos, promovidos por distintas razones, una fue el delicado estado de salud de la joven, sus celos reiterados y el hecho comprobado de que Rossetti era un seductor inconstante y atormentado, que tuvo diversas aventuras con sus propias modelos, entre ellas Fanny Cornforth y Anne Miller. Para resarcirse del comportamiento de Rossetti, Elizabeth se dedicó, con un éxito más bien modesto, a la pintura y a la poesía. Un año después de la boda entre Siddal y Rossetti, esta dio a luz en mayo a una hija muerta, lo cual la postró en un estado de honda melancolía, que provocó su posterior suicidio con láudano.
Este trágico suceso marcó para siempre a Rossetti, quien, acosado por el remordimiento, sufrió durante el resto de su vida depresiones recurrentes, que se acentuaron con su adicción al opio, la droga de la época, al alcohol y al cloral, fuerte medicina que le producía visiones. Precisamente esa melancolía interna y sus problemas de alcoholismo, de las que hacía gala Rossetti fueron los causantes de su éxito entre los coleccionistas, que aclamaban sus cuadros de índole renacentista, siempre representando hermosas mujeres (casi siempre pelirrojas) en un estado de tristeza o de ensoñadora quietud. Sin embargo, aún fue protagonista, antes de su muerte, de otro escándalo: en 1857 conoció a la esposa de su alumno William Morris, Jane Morris, de soltera Burden, de quien se enamoró perdidamente, y ella de él. La turbadora y larga relación, que llegó a ser de dominio público, se acentuaba con las frecuentes visitas que Jane hacia a Rossetti, posando regularmente para él en sus cuadros, mientras Morris soportaba la infidelidad de su esposa con estoicismo.
Durante la década de los setenta, Rossetti publicó un libro de poesía que fue acogido con disgusto entre los críticos, lo cual le provocó cierta manía persecutoria, además de nuevos estados de depresión; agotado por las malas críticas y su estado personal, trató de suicidarse con láudano, el mismo método utilizado años antes por su esposa Elizabeth, pero al final no consiguió su propósito. Nuevos pedidos de coleccionistas animaron un poco su estado, y continuó pintando sus ya famosas mujeres malditas durante muchos años. En 1881 publica una nueva edición de su libro Poems, y un nuevo volumen, Baladas y sonetos. Al año siguiente, durante un viaje con su pupilo Thomas Hall Caine moriría en Kent.
La obra de Rossetti es muy prolífica y se distingue por sus conocidos temas, recurrentes y similares entre sí, en los cuales la mujer es la absoluta protagonista, especialmente, la ensalzada como heroína, maldita, seductora, trágica... se basó en poemas propios, en las obras de Dante y en otros temas literarios que Rossetti conocía bien gracias a sus extensos conocimientos. Sus cuadros más famosos son Venus Verticordia, de 1868, La amada, de 1865, La enguirnaldada, de 1873 y Astarte Syriaca, de 1877.
William Morris
Morris fue uno de los componentes de la Confraternidad que menos pinturas ofreció a su causa; sin embargo, destacó como arquitecto y decorador. Sus ideas se oponían a la industrialización, y deseaba volver a un estado y modo de vida similar al medieval, donde todo se hacía a mano y no existían máquinas que hicieran los objetos de los hogares iguales unos a otros, sino únicos y especiales, completamente artesanos. Morris fue uno de los protagonistas de la segunda fase del movimiento prerrafaelita, junto con Burne-Jones. Perteneciente a una familia adinerada, estudió en el Exeter College de Oxford, donde conoció a Burne-Jones. Al conocer años después, a Rossetti, mientras estudiaba en el taller del arquitecto George Edmund Street decide dejar atrás sus estudios, y se acerca más a la poesía y a la pintura.
En 1859 Morris se casa con la deseada Jane Burden, y se marchan a vivir a la famosa Red House, al sudeste de Londres, una casa de estilo neogótico diseñada por él y por Phillip Webb. El mobiliario, la decoración y las pinturas fueron llevadas en común con otros artistas prerrafaelistas, convirtiendo la casa en un paraíso para ellos, donde no había rastro de su temida industrialización. Nacidas sus dos primeras hijas con Jane, Morris funda junto con otros artistas la Morris, Marshall, Faulkner & Co., una sociedad que quería aplicar a las artes decorativas los principios e ideales prerrafaelistas. La sociedad, llamada The Firm, después de exponer en 1862, fue totalmente rechazada por la crítica, pero alabada por el público, recibiendo así varios encargos. Este éxito se unió, años después, en 1868, a la publicación de su libro The Earthly Paradise, que le produjo un enorme éxito de ventas y crítica, llegando a convertirse por aquel entonces en un famosísimo poeta.
Después de alquilar con Rossetti una casa para el verano, la llamada Kelmscott Manor, en 1871, Morris se embarcó en diversos proyectos que marcaron su vida profesional y personal para siempre: realizó un largo viaje a Islandia, y regresó influenciado y repleto de ideas acerca del «retorno a la Naturaleza para liberar al hombre de la esclavitud de la industrialización». Sus ideas se volvieron utópicas y simpatizó con el Socialismo inglés de la época, adhiriéndose en 1883 a la Social Democratic Federation, una organización socialista en la que participaba Eleanor, hija de Marx. Conforme pasaron los años, Morris se volcó más en la vida política, sin descuidar su obligación con el arte, culminando su carrera en este ámbito con la fundación de la Arts & Crafts Society, en 1888.
Principalmente se destacan de Morris sus diseños más que sus cuadros, especialmente los de muebles (sillas, camas, etc.) y sus papeles para pared, como Margaritas, de 1864, y Rosas, de 1883 o sus tapices. Su obra pintada más conocida es La bella Isotta, de 1859, donde representó a su amada esposa Jane. Morris diría, lamentándose ante lo que él consideraba su pobre estilo, de este cuadro a su mujer: «No puedo pintarte, pero te quiero».
Edward Coley Burne-Jones
Burne-Jones se formó principalmente siendo niño en la King Edward´s School, en Birmingham, conocida por su severidad, y donde destacó como un alumno aventajado. En esos años comenzó a interesarse por la pintura y el dibujo. En 1852 es invitado por un compañero de clase y conoce a su hermana, Georgiana, con quien se casará en 1860, y que será su primera biógrafa (y después , también, tía del escritor Rudyard Kipling). Durante la década de los cincuenta y los sesenta forjará sus primeros y felices contactos con artistas como Morris, al que conocerá en el Exeter College, y con Rossetti, a quien tomará apasionadamente como maestro. Gracias a estos contactos logrará sus primeros encargos y los diseños de algunas vidrieras, de tema medieval, que le darán el apoyo de la crítica.
1877 será un año fundamental para Burne-Jones, quien participará en la muestra de la Grosvenor Gallery, en compañía de otros artistas como Alma-Tadema, Millais y Whistler. Sus pinturas tuvieron tal favorable acogida, que se presentó a la Exposición Universal de París de 1878. Su popularidad creció como la espuma, creando incluso una «moda». Esta popularidad y aprecio no decreció con los años. Continuó pintando, haciendo ilustraciones para libros y escenografías teatrales hasta su muerte, acaecida en 1898. Cuatro años antes fue nombrado baronet y fue alabado por la Exposición Universal de 1889.
Sus únicos puntos oscuros en su biografía fueron dos, uno cuando tuvo que ejercer de testigo en un juicio, por una larga causa judicial entre su maestro Ruskin y su amigo, Whistler, y otro cuando se enamoró de su modelo predilecta, Maria Zambaco, lo cual le sumió en una turbadora relación con ella.
Las pinturas de Burne-Jones son fácilmente reconocibles por su estilo delicado, que toma como ejemplo a pintores del Quattrocento florentino como Botticelli: figuras alargadas, paños detalladamente realizados, rostros soñadores... sus pinturas más relevantes son Astrología, de 1864, El encanto de Merlín, de 1874, La escalera de oro, de 1876 y Perseo se arma, de 1885. A diferencia de otros autores prerrafaelitas que sucumbieron al tema popular de la época o a la denuncia social, Burne-Jones jamás se separó del tema medieval o clásico. Una de las obras más reconocidas es la monumental obra maestra The Last Sleep of Arthur in Avalon, la cual se encuentra en el Museo de Arte de Ponce, Puerto Rico. Burne-Jones dedicó casi los últimos veinte años de su vida a dicha obra, la cual quedó inconclusa. Comenzó a pintarla en el 1881 y la continuó hasta su muerte en el 1898. Este cuadro mide 9 pies de alto y 21 pies de ancho y representa el momento en que el Rey Arturo está moribundo por las heridas recibidas en su última batalla, atendido por tres reinas y varios sirvientes en la mítica isla de Avalon. Los críticos creen que en esta obra Burne-Jones representa su propia muerte, así como aspectos simbólicos autobiográficos de su vida.
Colecciones
Hay importantes colecciones de arte prerrafaelista en la Tate Gallery, la Manchester Art Gallery, la Lady Lever Art Gallery en Merseyside, en el Birmingham Museum & Art Gallery y en el Museo de Arte de Ponce en Puerto Rico.
Referencias
- ↑ [Staley, Allen; Newalll, Christopher (2004) Prerrafaelitas: la visión de la naturaleza. Madrid: Fundación “la Caixa”. ISBN 84-7664-854-5]
Bibliografía
- Daly, Gay (1989). Pre-Raphaelites in love. New York: Ticknor & Fields. ISBN 0-89919-450-8.
- Gaunt, William. Pre-Raphaelite Tragedy. ISBN 0-351-16418-9.
- Hawksley, Lucinda (1999). Essential Pre-Raphaelites. Paragon, United Kingdom. ISBN 1-84084-524-4.
- Staley, Allen; Newalll, Christopher (2004). Prerrafaelitas. La visión de la naturaleza. Madrid: Fundación La Caixa. ISBN 84-7664-854-5.
- Stevens, Bethan (2008). Pre-Raphaelites. London: The British Museum Press. ISBN 978-0-7141-5066-6.
Enlaces externos
- Recopilación de enlaces (en inglés)
- Pintura prerrafaelista en la Liverpool Walker Art Gallery (en inglés)
- Pre-Raphaelite Chronology (en inglés)
- Pre-Raphaelite Brotherhood: Biographies (en inglés)
Categorías: Prerrafaelismo | Pintura moderna
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